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Publicado el 13/01/2025
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Hace muchos años, el currículum era solo un papel en el que se plasmaba la experiencia laboral y los datos personales. Para muchos, no era algo tan importante, pero, con el paso del tiempo, cambió por completo. Actualmente, el CV es tu carta de presentación, tu primer contacto con posibles empleadores, y debe reflejar tus habilidades más relevantes, pero de un modo bastante creativo y llamativo.
Y, ¿tienes idea de cómo puedes hacerlo sin morir en el intento? Lo que debe destacar por de más en tu curriculum vitae son tus habilidades, pues de ello depende que te considere para un puesto o no. Sí, así tal cual. Por ello, queremos ayudarte y decirte qué incluir para abrirte las puertas a nuevas oportunidades profesionales.
Por si no lo tienes muy claro, te explicamos a detalle que las habilidades de un currículum son las competencias y capacidades que posees y que te capacitan para desempeñar con éxito las responsabilidades de un puesto de trabajo. Están las blandas y duras, e incluirlas claramente en tu carta de presentación (o CV) te ayudará a llamar la atención antes los reclutadores, quienes evaluarán tus aptitudes y qué tan idóneo puedes ser para el puesto.
En el punto anterior comentamos qué son las habilidades que debes colocar en el currículum, y acotamos que hay dos tipos que se dividen en duras y blandas. Estas se dividen así:
Son habilidades específicas y medibles que se adquieren a través de la educación, formación o experiencia práctica. Algunas son:
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Las habilidades blandas se asocian con el comportamiento, la personalidad y las relaciones interpersonales, y los ejemplos son los siguientes:
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La importancia de las habilidades en un currículum radica en su colaboración con los reclutadores para evaluar rápidamente si un candidato tiene las competencias necesarias para desempeñar el trabajo de modo efectivo. Incluirlas te hará destacar frente a otros candidatos, siendo elemental ahora que el mercado laboral se ha vuelto tan competitivo. En 2025, las empresas requieren y necesitan personas capaces de adaptarse y dar su máximo potencial para el crecimiento progresivo del negocio.
No creas que todas las habilidades son clave para destacar, todo depende del tipo de trabajo y de la industria a la que te postules, pero en general, hay algunas que suelen ser muy valoradas en casi todos los campos. Aquí se incluyen tanto competencias técnicas como interpersonales, y suelen reflejar lo siguiente:
La capacidad para expresar ideas de manera clara, tanto de forma escrita como oral, es fundamental en cualquier puesto. Ser capaz de comunicarte bien con compañeros, clientes y superiores es esencial para un ambiente de trabajo productivo.
Los empleadores valoran a quienes colaboran bien con otros para lograr objetivos comunes. Ser un buen miembro de equipo implica saber escuchar, apoyar a los demás y contribuir de manera positiva al ambiente grupal.
Las compañías buscan candidatos que identifiquen problemas debidamente y propongan soluciones creativas. La capacidad para resolver desafíos siendo independiente o en equipo es altamente apreciada.
La habilidad para priorizar tareas, cumplir plazos y manejar varias responsabilidades de manera eficiente es crucial en el mundo laboral. Los empleadores valoran a aquellos que organizan su tiempo para maximizar la productividad.
En un entorno laboral que cambia constantemente, ser capaz de adaptarse a nuevas situaciones, tecnologías o metodologías es una habilidad muy importante porque significa que puedes ajustar el enfoque cuando sea necesario.
Incluso si no estás aplicando a un puesto de gestión, las habilidades de liderazgo son valiosas, es decir, la capacidad de motivar a otros, tomar decisiones acertadas y dirigir proyectos.
Dependiendo del sector, las habilidades técnicas específicas, como el dominio de software, lenguajes de programación, herramientas especializadas o conocimientos en análisis de datos, son muy importantes porque significan que cumples con las funciones del puesto.
La habilidad para evaluar información, analizar situaciones y tomar decisiones fundamentadas es muy relevante. El pensamiento crítico te hace ver más allá de lo obvio y encontrar soluciones más efectivas.
Para colocar tus habilidades en un currículum, debes presentarlas clara y estratégicamente. ¿No sabes cómo? Tenemos unos buenos consejos para ti:
Incluye una sección titulada “Habilidades”, “Competencias” o “Habilidades clave”. Debe ir después de tu resumen profesional o experiencia laboral, y debe ser fácil de identificar para que los reclutadores vean rápidamente qué habilidades ofreces.
Si tienes una amplia gama de habilidades, clasifícalas en dos categorías principales: habilidades duras (técnicas) y habilidades blandas (interpersonales). Así será más sencillo para la empresa entender cómo puedes contribuir en varias áreas. Por ejemplo:
Los reclutadores y los sistemas de seguimiento de candidatos (ATS) a menudo buscan ciertas palabras clave, por lo que incluir términos específicos relacionados con la industria o el puesto es crucial. Procura que las habilidades que mencionas estén alineadas con los requisitos del trabajo que estás solicitando.
En lugar de mencionar habilidades genéricas como "habilidades de comunicación", trata de ser más específico. Por ejemplo, "redacción y presentación de informes técnicos" o "negociación y manejo de clientes".
Aparte de tener una sección de habilidades, es preciso incorporar ejemplos de cómo has usado esas habilidades en tus roles anteriores. Esto muestra que no solo las tienes, sino que también has aplicado esas habilidades con éxito en tu trabajo. Por ejemplo:
Coloca primero las habilidades que son más relevantes para el puesto al que estás aplicando. Si estás postulando para un puesto técnico, destaca tus habilidades técnicas en primer lugar. Si el puesto requiere más interacción con personas, las interpersonales deberían ser las más destacadas.
Cuando incluyes habilidades en tu currículum, hazlo adecuadamente para que funcione de verdad. Está guía te servirá:
Evita listar habilidades que no están relacionadas con el puesto al que estás postulando. Asegúrate de que las mencionadas sean asombrosas para el trabajo y la industria. Incluir habilidades irrelevantes hace que tu currículum pierda foco y no capte la atención del reclutador.
Es tentador inflar tu currículum para parecer más cualificado, pero esto es contraproducente. Si no tienes experiencia en una habilidad que mencionas, es probable que te descubran durante una entrevista o, peor aún, cuando comiences el trabajo. Sé honesto sobre tus habilidades y experiencia.
Evita incluir habilidades vagas como "buen comunicador" o "trabajo en equipo". Aunque son habilidades significativas, son tan comunes que no destacan. En lugar de eso, especifica cómo usas esas habilidades, por ejemplo: "Redacción de informes técnicos" o "Colaboración en equipos multidisciplinarios para proyectos internacionales".
Evita términos vagos que confundan al reclutador. Por ejemplo, no emplees frases como "conocimiento básico" o "familiaridad con", a menos que sea estrictamente necesario. Si tienes dominio de una herramienta o habilidad, dilo con claridad: "Uso avanzado de Excel" o "Certificación en programación Python".
Si has aprendido nuevas habilidades o herramientas relevantes para tu carrera, actualiza tu currículum. No dejes que tu perfil quede obsoleto, aún más si has adquirido nuevas competencias tecnológicas, de gestión o de otra índole que puedan mejorar tus posibilidades para el puesto.
Cada oferta de trabajo puede tener requerimientos específicos en cuanto a habilidades. No uses el mismo currículum para todas las aplicaciones. Personaliza tus habilidades en función de lo que el empleador busca en la oferta de trabajo. Usa palabras clave de la descripción del puesto para que tu currículum sea más relevante y pase los sistemas de seguimiento de candidatos (ATS).
Si bien las habilidades técnicas son de las más valiosas, no subestimes el valor de las habilidades blandas, como la comunicación, liderazgo y trabajo en equipo, porque sirven para la cultura organizacional y la forma en que interactúas con los demás en el sitio de trabajo.
Solo listar habilidades sin proporcionar contexto o ejemplos prácticos, resta impacto a tu CV. Muestra cómo has utilizado esas habilidades en tu experiencia laboral o en proyectos determinados. Eso te da más credibilidad y demuestra tu capacidad para aplicar lo aprendido.
Si no tienes experiencia directa en el área a la que te estás postulando, destaca tus habilidades enfocándote en los proyectos personales, trabajos académicos, voluntariados o incluso actividades extracurriculares donde hayas utilizado esas habilidades. Resalta cualquier formación o certificación relevante que hayas completado, como cursos en línea, talleres o prácticas.
Además, menciona cómo esas habilidades se aplican a situaciones cotidianas o en otros ámbitos, mostrando que tienes la capacidad de adaptarlas al nuevo entorno laboral. Por ejemplo, si has aprendido a programar por tu cuenta, acota proyectos de código que hayas realizado, a pesar de que no sean trabajos remunerados. El propósito es mostrar tu proactividad, disposición para aprender y tu potencial para adaptarte al puesto.
Sí, incluir habilidades digitales en tu currículum vitae es muy recomendable en el ambiente laboral actual que cada vez está más orientado hacia la tecnología. Las habilidades digitales son esenciales en casi todos los sectores y pueden ser un factor diferenciador en tu perfil.
Desde el manejo de software específico (como herramientas de gestión de proyectos, diseño o análisis de datos) hasta habilidades más generales como la competencia en redes sociales, marketing digital o el uso avanzado de herramientas de productividad (por ejemplo, Excel o Google Suite), son competencias que demuestran que estás preparado para adaptarte a los entornos de trabajo modernos.
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Cómo sabes, nos encanta llegar al final con algunos consejos efectivos para ti. Síguelos y podrás adaptar tus habilidades a la oferta laboral:
Antes de aplicar, entiende completamente las habilidades que la empresa está buscando. Presta atención a las palabras clave relacionadas con las habilidades técnicas y blandas mencionadas en la oferta.
Si tienes experiencia en áreas similares, aunque no sean exactamente iguales, menciona cómo tus habilidades pueden transferirse a la nueva posición. Por ejemplo, si has trabajado en atención al cliente, pero ahora te postulas para ventas, puedes resaltar habilidades como la comunicación, resolución de problemas y trabajo bajo presión.
Cuando menciones una habilidad, respáldala con ejemplos concretos de cómo la has aplicado en el pasado. Esto demuestra tu capacidad para usarla efectivamente, ya sea en proyectos, en la universidad o en experiencias anteriores.
Si no tienes una habilidad específica que se menciona en la oferta, no la incluyas, pero si tienes la disposición de aprenderla, menciona tu interés por desarrollarla. Muchas veces, los empleadores valoran la actitud positiva y las ganas de adquirir nuevas competencias.
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Aquí logramos aprender que las habilidades son el alma de un currículum que capta la atención de los reclutadores. A medida que el mundo laboral sigue evolucionando, contar con una combinación sólida de habilidades técnicas y blandas no solo te hace más competitivo, sino que te prepara para enfrentar los retos del futuro.
Identificar las mejores para tu industria y presentarlas estratégicamente es esencial para avanzar en tu carrera. Con esta guía, tendrás las herramientas necesarias para asegurarte de que tu CV destaque, y con ello, las oportunidades laborales que siempre has soñado. ¡No subestimes el poder de tus habilidades!
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